Eres lo que expresas

 

 

Hace años empecé a revisar mi manera de hablar. Intento practicar lo máximo que pueda las expresiones o comunicaciones que me ayudan a avanzar. He decidido escribir este blog ya que últimamente me he fijado en que algunas personas no están aprovechando estos recursos,

- las palabras-.

 

Mi primer “Encuentro” con las palabras fue justo después de recibir mi primera sanación energética. En aquella época estaba con una crisis existencial. Realmente no sabía cómo salir de aquella situación ya que viví un evento donde ví una carencia emocional importante dentro mío. Estaba desesperada, sentía que había vivido una vida que carecía de mucho sentido. Curiosamente aun así una parte de mi estaba fascinada con la sanadora y su técnica; estaba teniendo una experiencia espiritual nunca antes vivida. Por otra parte, tenía duda de cómo esta experiencia podría influir sobre mi estado.    

 

La sanadora-terapeuta comprobó con su sensibilidad que mi energía había mejorado. Llegó el final de la sesión y me preguntó: “¿Cómo te encuentras?”  Y yo recordando el motivo de la visita, respondí; “Siento que estoy sola en el mundo.”

 

Me acuerdo muy bien cómo se cambió la cara de la terapeuta, abrió los ojos y a continuación mostró un signo de tristeza. Claramente porque ella no esperaba esa frase de mi. Dijo “Por ahora quizás sientes así, eso cambiará.”  Ella me recetó una afirmación personalizada y me dijo que trabajara con ella todos los días. Esa sesión fue exitosa, yo iba notando los cambios en mi. Aquella experiencia me nutrió y empecé a tomarme en serio el desarrollo espiritual. 

 

 

 Yo Soy mi propia sanadora

 

 

Después de un tiempo, entendí porque ella estaba sorprendida y triste con lo que dije. Porque mi atención estaba en el vaso medio vacío, en ese momento no sabía que YO TAMBIÉN ERA SANADORA EN LA SESIÓN. Yo era colaboradora de la terapia, Co-creadora de una realidad mía. Yo soy la protagonista de mi vida donde ella estaba depositando la fé y yo en cambio, fácilmente la solté. Eso fue lo que ví en su cara.  

 

Para generar una palabra audible existe una voluntad de pronunciarla. Hay una intención de sacarla al mundo, y eso es CREAR. Si yo quería crear una realidad donde yo me vería capaz de amar al prójimo, saliendo de mi coraza y abriendo mi corazón al mundo mi expresión tendría que ser acorde a esa realidad. Y no se trata de autoengaño, sino poniendo el enfoque al vaso medio lleno que acabamos de crear.    

 


 

 

“Una afirmación es realmente todo lo que dices o piensas. Mucho de lo que normalmente decimos y pensamos es bastante negativo y no crea buenas experiencias para nosotros. Tenemos que reeducar nuestro pensamiento y hablar en patrones positivos si queremos cambiar nuestras vidas”.

-Louise Hay-